Actualización 19.12.24.
¿Cómo no engordar en Navidad? Es una pregunta que ha empezado a acompañarnos desde la segunda quincena de diciembre. Periodo de Navidad y Año Nuevo plantea ciertos retos a las personas preocupadas por su figura o que intentan reducir peso. La variedad de apetitosos platos festivos, las abundantes raciones y las reuniones familiares que suelen ir acompañadas de alcohol pueden dificultar el mantenimiento de un estilo de vida saludable. Sin embargo, hay formas de evitar un aumento excesivo de peso durante las fiestas. He aquí algunos consejos prácticos. ¿Merece la pena adelgazar antes de Navidad?

No adelgaces antes de Navidad
Un error bastante común es querer adelgazar justo antes de Navidad. Normalmente, las 2 primeras semanas de nuestra reducción implican un descenso del agua y el glucógeno, así como del contenido intestinal. Esto significa que, en realidad, no perdemos mucha grasa, sino que el peso en la báscula puede variar hasta unos 3-4 kilogramos. En consecuencia, pensamos que estamos perdiendo peso. Durante el periodo festivo, en cambio, ganamos rápidamente el agua que hemos perdido, además de que el azúcar y la sal que contienen nuestras comidas aumentan aún más nuestro peso corporal. Más tarde resulta que acabamos engordando más durante el periodo festivo de lo que habríamos engordado sin la opción de adelgazar antes.
Si está pensando en mejorar su figura, planifíquelo para el periodo de Año Nuevo. Antes de Navidad, procure no engordar.
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¿Cómo no engordar? Sigue una dieta estándar
Consumir comidas equilibradas y saciantes durante el periodo festivo y prenavideño puede ayudar significativamente a mantener un estilo de vida saludable y evitar un aumento excesivo de peso. Merece la pena tener en cuenta las comidas que forman parte de nuestra dieta diaria, ya que son ricas en valor nutritivo y dan sensación de saciedad.
Por ejemplo, podemos sustituir el tradicional y calórico desayuno navideño por una opción más saludablecomo avena completa con fruta y frutos secos. Así nos sentiremos saciados y satisfechos, lo que reducirá el deseo de consumir en exceso alimentos navideños calóricos. Del mismo modo, si vamos a comer bocadillos, podemos elegir pan integral con hummus, verduras y jamón magro en lugar de bocadillos calóricos.
También conviene recordar que las comidas regulares ayudan a regular el apetito y a controlar la ingesta de calorías. Por lo tanto, le animamos a que haga comidas normales, incluso durante las fiestas, siempre que sea posible. Este enfoque ayudará a reducir el riesgo de un aumento excesivo de peso durante las fiestas.
Aplicar pequeñas porciones
Piensa en la cantidad de comida que hay ahora en la mesa, con más días llenos de caprichos festivos por delante. Realmente es mucho, ¿verdad? Desde el principio, es una buena idea establecer la norma de no poner más de la mitad de una ración estándar en el plato.y a veces basta con una cucharada simbólica. Sé que muchos de nosotros tenemos nuestros platos favoritos por los que esperamos todo el año y que ahora "DEBEN" estar en la mesa. Por supuesto, lo entiendo perfectamente. Sin embargo, un acompañamiento está bien, pero con la condición de que se coma con gusto y no "porque es otra ocasión sólo el año que viene". Se trata de ejercer la moderación, para no amontonar en el plato la ración habitual de comida reflejo.
Recuerda que no tienes que probar todos los platos, sobre todo si son muchos. Es importante comer los platos que realmente te gustan. Lo que era obligatorio en la casa familiar no tiene por qué serlo en la tuya. Merece la pena crear tus propias tradiciones y normas. Si te apetece probar algo nuevo, siempre hay tiempo, pero no es necesario probarlo todo, sobre todo si no sientes la necesidad. Nadie te va a juzgar por la cantidad que pongas en el plato, y no es probable que haga falta poner cámaras para vigilar tu cena de Navidad. Lo importante es disfrutar de las comidas y pasar tiempo con la familia y los seres queridos.
Evita las bebidas azucaradas para no engordar

Las bebidas gaseosas y los zumos son conocidos por su alto contenido en azúcar, que no sólo aporta calorías innecesarias, sino que también puede estimular el apetito. A menudo ocurre que bebemos muchos, lo que no hace sino agravar nuestro problema de placer. Por ejemplo, incluso un vaso de zumo tres veces al día puede aportar una cantidad importante de calorías y azúcar.
Por lo tanto, a la hora de elegir las bebidas que se van a consumir, tiene sentido optar por opciones más saludables. Una de las mejores opciones es el agua, que no sólo no tiene calorías sino que ayuda a mantener el cuerpo hidratado. Alternativamente, las infusiones son una gran opción, ya que proporcionan sabores agradables sin azúcares añadidos.
Si le apetece algo un poco más dulce, la compota de frutos secos puede ser una excelente opción. No sólo es sabrosa, sino que además contiene azúcar natural de la fruta y puede ser beneficiosa para la digestión.
No tenga miedo de decir no a las comidas
Muchas personas tienen miedo de decir no a más porciones de dulces para sus seres queridos. No hay nada malo en dar las gracias por la comida. No tengas miedo de decirle a tu tía que ya estás llena y que no puedes comer más. Es una regla muy sencilla que funciona. Comunica asertivamente que ya has comido suficiente.
¡Muévete!
Sentarse a la mesa repleta de platos festivos puede resultar bastante cansado, sobre todo para quienes se mantienen activos a diario y valoran el ejercicio regular. Por eso merece la pena recordar algunas formas sencillas de romper ese idilio con la mesa mientras se disfruta de los sabores de la Navidad. ¿Quizá nuestras sugerencias también consigan que otros miembros de la casa se pongan activos?
Paseo navideño: Es una forma estupenda de alejarse de la mesa y refrescarse. Puede ir a una cabaña de pastores, visitar a la familia o pasear con su perro por un parque cercano. Esto no sólo te proporcionará algo de ejercicio al aire libre, sino también un momento de relajación y paz.
Entrenamiento rápido: ¿Quién dice que hay que renunciar a entrenar en Navidad? Si te apetece, elige un día para hacer un entrenamiento intenso. Te sentirás con energía y de buen humor antes de reunirte con tu familia. Además, podrás comer un poco más de lo habitual sin preocuparte por el exceso de calorías.
Actividades familiares: La Navidad es la época perfecta para hacer actividades en familia. Podéis hacer juntos un muñeco de nieve, ir en trineo o incluso organizar un baile familiar en la consola. Esto no sólo mantendrá entretenidos a todos, sino que además os permitirá pasar tiempo juntos y crear recuerdos maravillosos.
Recordemos que la Navidad es una época de alegría, amor y de pasar tiempo junto a los seres queridos. La actividad física puede ser un complemento maravilloso de estos momentos y ayudarnos a mantener un equilibrio entre la comida y el movimiento.
Cómo no engordar en Navidad - resumen
La Navidad es una época en la que nos reunimos con nuestros seres queridos y solemos festejar juntos. Sin embargo, debemos recordar que este acontecimiento no sólo gira en torno a la mesa. Así no te centrarás sólo en cómo no engordar. Encuentra tiempo para descansar de la comida, hacer un poco de ejercicio y utilizar el sentido común. La comida no debe ser la actividad principal que realices en estos días.
