La insulina desempeña un papel fundamental en la regulación de los niveles de glucosa en sangre y es esencial para que el organismo funcione correctamente. Para las personas con diabetes, el control, las pruebas y la administración regulares de insulina son la piedra angular del tratamiento. En este artículo analizaremos qué son las normas de insulina, cómo actúa en el organismo y cómo administrarla correctamente para mantener estables los niveles de azúcar en sangre.
¿Qué es la insulina?
La insulina es una hormona producida por las células beta del páncreas. Su función principal es permitir que las células del organismo, principalmente el hígado, los músculos y los tejidos grasos, utilicen la glucosa como fuente de energía. Deficiencia de insulina o una respuesta anormal del organismo a esta hormona conduce a una diabetes - enfermedad caracterizada por niveles elevados de glucosa en sangre.
Tipos de diabetes
Existen dos tipos principales de diabetes: diabetes tipo 1 i diabetes tipo 2.
- Diabetes tipo 1 - es el resultado de la destrucción autoinmune de las células beta del páncreas, lo que conduce a la privación de insulina. Requiere la administración diaria de insulina.
- Diabetes de tipo 2 - es el resultado de la resistencia celular a la insulina, lo que significa que el organismo produce insulina pero no la utiliza eficazmente.
Insulina - normas
Los análisis regulares de los niveles de insulina son cruciales, especialmente para las personas diabéticas. El nivel normal de insulina en sangre en ayunas suele ser de 2-25 μU/mlpero estos valores pueden variar de un laboratorio a otro. Los valores por debajo o por encima de lo normal pueden sugerir problemas en el metabolismo de la glucosa y la insulina, que pueden provocar diabetes u otros trastornos metabólicos.
¿Qué pruebas se realizan?
La prueba más común que se realiza es prueba de insulina en ayunasque evalúa los niveles de insulina en reposo. Además, pruebas como:
- Prueba de carga de glucosa (OGTT): permite ver cómo reacciona el organismo ante grandes cantidades de glucosa.
- Hemoglobina glucosilada (HbA1c) - mide los niveles medios de azúcar en sangre durante los últimos 2-3 meses.
- Péptido C - se utiliza para evaluar la producción de insulina por el páncreas.

Efecto de la insulina
La hormona actúa uniéndose a los receptores de la superficie de las células, lo que permite transportar la glucosa de la sangre a las células, donde se utiliza como energía o se almacena en forma de glucógeno. La insulina también se encarga de regular el metabolismo de las grasas y las proteínas.
Insulina y diabetes de tipo 1
En la diabetes de tipo 1, el organismo es incapaz de producir insulina, lo que provoca un aumento de los niveles de glucosa en sangre. Las personas con esta enfermedad necesitan administrarse insulina a diario para mantener normales sus niveles de azúcar en sangre.
Insulina y diabetes de tipo 2
En la diabetes de tipo 2 se produce insulina, pero las células se vuelven resistentes a ella. En muchos casos, la diabetes de tipo 2 puede controlarse con dieta, ejercicio y medicación oral, pero algunos pacientes pueden necesitar también insulina.
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Tipos de insulina utilizados en el tratamiento de la diabetes
La insulina utilizada en el tratamiento de la diabetes varía en términos de velocidad de acción, duración del efecto y momento del pico de acción. Tipos de insulina pueden dividirse en:
- Insulina de acción rápida - empieza a hacer efecto en 15 minutos y dura aproximadamente de 2 a 4 horas.
- Insulina de acción corta - comienza a actuar a los 30 minutos y alcanza su punto máximo a las 2-3 horas, con una duración de acción de 5-8 horas.
- Insulina de acción intermedia - empieza a hacer efecto al cabo de 1-2 horas y puede durar hasta 18 horas.
- Insulina de acción prolongada - empieza a hacer efecto al cabo de unas horas y dura 24 horas o más, lo que permite que los niveles de azúcar se mantengan estables a lo largo del día.
Insulina: modo de administración
La administración de insulina es una parte fundamental del tratamiento de la diabetes. La insulina puede administrarse de varias formas:
Inyecciones de insulina
Los métodos más habituales de administración de insulina son inyecciones. Se realizan con jeringuillas o plumas especiales para insulina. Las inyecciones se administran por vía subcutánea, normalmente en el abdomen, los muslos o los brazos.
Bombas de insulina
Bombas de insulina son dispositivos de última generación que administran insulina a lo largo del día de forma controlada. La bomba permite una dosificación más precisa de la insulina, lo que resulta especialmente útil para los pacientes con diabetes de tipo 1 que requieren ajustes frecuentes de la dosis de insulina.
Trasplante de islotes pancreáticos
En algunos casos es posible trasplante de islotes pancreáticosque puede producir insulina en el organismo. Sin embargo, se utiliza con poca frecuencia, sobre todo en casos graves de diabetes de tipo 1 cuando han fracasado otros tratamientos.
Recomendaciones para la administración de insulina
La correcta administración de insulina requiere habilidades y conocimientos adecuados. Para que la insulina funcione eficazmente, es necesario:
- Utilice la insulina tal y como se la haya recetado su médico. La dosis y el tipo de insulina dependen de las necesidades de cada paciente.
- Cambiar los puntos de inyección. Para evitar el engrosamiento de la grasa (lipodistrofia), es importante cambiar regularmente los puntos de administración de insulina.
- Controlar los niveles de azúcar en sangre. Las mediciones periódicas de la glucosa ayudarán a ajustar las dosis de insulina y evitar la hipoglucemia.
Complicaciones relacionadas con la insulinoterapia
A pesar de los beneficios de la insulinoterapia, pueden producirse algunas complicaciones en las personas que toman insulina:
- Hipoglucemia - un nivel de azúcar en sangre demasiado bajo, que puede provocar mareos, debilidad y, en casos extremos, pérdida del conocimiento.
- Lipodistrofia - Engrosamiento del tejido adiposo en los lugares de administración de la insulina, que puede impedir la absorción del fármaco.
- Reacciones alérgicas - Aunque son raras, pueden producirse reacciones alérgicas a la insulina o a sus componentes.
Insulina: ¿cómo evitar complicaciones?
Aunque las complicaciones asociadas al tratamiento con insulina pueden ser molestas, existen métodos para evitarlas o minimizar su riesgo. He aquí algunas medidas para ayudar a mantener un tratamiento eficaz con insulina:
Control regular de los niveles de azúcar
El control frecuente de los niveles de glucosa en sangre permite ajustar adecuadamente las dosis de insulina y prevenir estados peligrosos de hipoglucemia e hiperglucemia. Es conveniente llevar un diario de mediciones para registrar los resultados y las dosis de insulina administradas.
Rotación de los puntos de inyección
Es importante evitar la administración continua de insulina en las mismas zonas de la piel. Rotación de los puntos de inyección ayuda a prevenir la lipodistrofia y permite que el organismo absorba la insulina de manera uniforme. Se recomienda administrar insulina en zonas como el abdomen, los muslos, las nalgas o los brazos, cambiando el lugar de cada inyección.
Mantener una dieta sana
Las personas que toman insulina deben tener cuidado de una dieta equilibrada adaptada a sus necesidades calóricas y al tipo de diabetes. Evitar los picos repentinos de glucosa en sangre derivados de una dieta inadecuada es clave para mantener la estabilidad metabólica. Deben tomarse regularmente comidas ricas en proteínas, fibra y grasas saludables, mientras que los azúcares simples deben limitarse.
Educación y autocontrol
La formación periódica sobre el autocontrol de los niveles de azúcar y la administración de insulina es una parte esencial del tratamiento de la diabetes. Los pacientes deben saber cómo reaccionar en caso de hipoglucemia o hiperglucemia y cómo ajustar las dosis de insulina en función de la situación (por ejemplo, durante la actividad física o una enfermedad).
Efecto de la insulina en el organismo
El uso prolongado de insulina puede afectar al organismo de muchas maneras. Además del efecto directo de regular los niveles de azúcar en sangre, la insulina también afecta al metabolismo de las grasas, las proteínas y los hidratos de carbono. Conviene recordar que las personas que toman insulina deben consultar periódicamente a su médico para evaluar la eficacia del tratamiento y los posibles efectos secundarios.
Metabolismo de las grasas
La insulina favorece el almacenamiento de grasa en el organismo, por lo que las personas que toman insulina pueden experimentar un aumento de peso, sobre todo si no siguen una dieta y una actividad física adecuadas. Sin embargo, una dosificación adecuada de la insulina y el control calórico de la dieta pueden evitar un aumento excesivo de peso.
Efectos sobre las proteínas y los músculos
La insulina favorece la síntesis proteica, que es crucial para quienes desean mantener una masa muscular sana. En pacientes con diabetes, un tratamiento insulínico adecuado, combinado con actividad física, puede ayudar a prevenir la pérdida de masa muscular y mejorar la forma física general.
Insulina y actividad física
La actividad física es una parte fundamental del control de la diabetes, sobre todo para las personas con diabetes de tipo 2. El ejercicio ayuda a aumentan la sensibilidad celular a la insulinalo que puede conducir a una mejor gestión de los niveles de glucosa en sangre. Las personas físicamente activas pueden necesitar dosis más bajas de insulina, ya que el ejercicio favorece el proceso natural de transporte de glucosa a los músculos.
¿Cómo se ajusta la insulina con el ejercicio?
Los pacientes deben consultar a su médico antes de introducir una actividad física intensa en su programa diario. Es importante recordar que el ejercicio puede reducir los niveles de azúcar en sangre, lo que puede requerir un ajuste de la dosis de insulina para prevenir la hipoglucemia. Por lo general, las personas que planean realizar ejercicio de intensidad media o alta deben tener en cuenta lo siguiente:
- Reducción de la dosis de insulina antes de la actividad física planificada.
- Consumo de una comida adicional rica en hidratos de carbono antes del ejercicio.
- Control regular de los niveles de glucosa antes, durante y después del ejercicio.
Insulina: ¿qué merece la pena recordar?
La insulina es una hormona clave en el tratamiento de la diabetes, sea del tipo que sea. Las pruebas periódicas, una educación adecuada y un estilo de vida sano son las piedras angulares de un tratamiento eficaz con insulina. Es importante que los pacientes colaboren estrechamente con su médico para controlar su estado y ajustar las dosis de insulina a las necesidades cambiantes de su organismo.
Gracias a los modernos métodos de administración de insulina, como las bombas de insulina y los modernos preparados de insulina de acción prolongada, el tratamiento de la diabetes es cada vez más cómodo y seguro. Dosificación correcta de la insulinay permite a los pacientes llevar un estilo de vida activo y saludable, minimizando el riesgo de complicaciones relacionadas con la diabetes.
Fuentes: